viernes, 7 de agosto de 2020

¡Te pido perdón Eleazar, pido perdón a tu familia, a tus hijos...!


No importa que se llamara Eleazar o Manuel, que naciese en Nicaragua o en España, que sus manos estuviesen llenas de callos o fuesen finas y de uñas cuidadas. Lo que importa, lo que de verdad importa es que en España exista la esclavitud y unos no lo quieran ver y otros no quieran que se inspeccionen los campos de trabajo forzoso en suelo español. Me avergüenzo y pido perdón a estas pobres gentes explotadas, maltratadas, esclavizadas en un país europeo y democrático.

Espero que la Justicia CUMPLA CON SU DEBER y no eche tierra sobre tu cadáver e imponga los explotadores una compensación para tu familia, una multa ejemplar y una pena de cárcel y que el Gobierno se anticipe para evitar que esta familia pase calamidades y penurias, mientras la lenta Justicia deje caer su mazo con contundencia. También  pido al Ministerio de Trabajo que agilice las inspecciones y termine de una vez con esta vergüenza que nos desacredita en Europa


Pero de verdad, a quienes tendría que caerles la cara de vergüenza es a estos señores, que permiten esta explotación humana y que  ni siquiera han puesto una nota de pésame ni han pedido perdón por esta vida arrancada por unos euros manchados con sangre

No hay comentarios:

Publicar un comentario