Me gustaría que las conciencias de los hombres traten
de asemejarse a estanques comunicados y
abiertos a un océano nuevo, sin plásticos, sin hidrocarburos, sin pesca
especulativa, sin aguas fecales, un océano de agua inmiscible, siempre transparente,
inodora, cristalina ante los vertidos sin depurar de prensa contaminada por
poderes fácticos, de propagandas maliciosas, violentas, terroristas… me
gustaría que todos hiciésemos un esfuerzo por ser afluentes de ese océano de vida. En ese
estanque de la conciencia crítica e inalterable precipitaríamos nuestras
vivencias, conocimientos sociales y someteríamos al resultado de la densidad, las conductas sin dejarnos influenciar por la
información maliciosa y partidaria para comprobar el verdadero peso específico
de las cosas, según un criterio propio en el que no afectaría el color, la
ideología, la posición social, el sexo, la edad, la religión del sujeto
analizado… solo la falta, la densidad del delito y así condenar (que
no castigar) a una pena justa, imparcial al acusado.
¿Para qué crear estos estanques?
Al igual que el patrimonio natural del Mundo se encuentran en
peligro por la especulación, la avaricia, la insensatez, el desprecio, la
conducta delictiva e impune, que ha convertido nuestros ríos en estercoleros,
nuestros océanos moribundos en grandes
masas de una amalgama de hidrocarburos, plásticos, aguas fecales y toda clase
de residuos donde se desarrolla una pesca abusiva, especulativa y exterminadora.
Una conducta hostil que convierte
nuestras selvas amazónicas, nuestras tundras en mares de fuego, casi
siempre con incendios provocados con fines especulativos, nuestros campos en
desiertos contaminados por pesticidas, herbicidas, abonos químicos, una conducta que convierte el
agua en un negocio transformando nuestros manantiales en caldo de detritus, una conducta que hace que el trigo
cotice en bolsa, que se regulen y patenten las semillas, que se roben las
tierras a pueblos indígenas que las heredaron sin escrituras, vírgenes de sus
antepasados y que son arrasadas para especular con soja, aceite de palma…Al
igual que ese patrimonio perdido, estamos perdiendo día a día la información
veraz y el significado transparente de la justicia.
Nuestros estanques darán vida a un océano primigenio,
anterior a que el hombre alterase el Planeta llevándolo a un Cambio Climático
que ya ha rebasado el punto de inflexión y cuyas consecuencias no pueden ser
más alarmantes.
Personalmente analizo en mi estanque particular personas que
han cometido grandes delitos que nos afectan y nos conmueven y puedo comprobar
con autocrítica la densidad con que se hunden en un abismo de fosas más
profundas que las oceánicas, sujetos despreciables como los componentes de la
Manada, cinco bestias violadores de una joven indefensa de dieciocho años, Ana
Julia, asesina del niño Gabriel (el Pececito), Bretón, asesino de sus dos hijos
Ruth y José, El Chicle, asqueroso asesino de Diana Quer, en las mismas fosas se
decantan monstruos contaminados por ideologías como Anders Behring que
convirtió la isla de Utoya en un infierno segando la vida de unos jóvenes inocentes,
se precipitan en mi estanque hasta las fosas siderales políticos que la
justicia terrenal no alcanza a castigar y que han sido la causa de tanto
sufrimiento al especular con viviendas públicas y venderlas a Fondos Buitre a
bajo precio, arrojando a la calle a sus inquilinos, los verdaderos culpables de accidentes
como el del Tren Alvia de Santiago, del Metro de Madrid, accidente del Yak42,
accidente del Madrid Arenas.
A pesar de la gravedad e irresponsabilidad de sus actos, en
mi estanque se hunden lentamente sin llegar tan profundo, los separatistas
catalanes acusados de sedición, teniendo mucho más peso y hundiéndose más
profundamente los que alientan la violencia en Cataluña, por el daño social que están infligiendo
a una sociedad pacífica, convirtiendo la convivencia en un caos.
Se hunden precipitadamente hasta lo más profundo, donde la
luz no puede penetrar, los políticos corruptos que han sido causa de una crisis-negocio, arruinado las cajas de ahorros, saqueado los fondos públicos, amordazando
a la población, castrado artículos constitucionales que nos defendían de las hordas
financieras sin Dios ni Patria, recortando derechos humanos, esclavizado con
leyes inhumanas a trabajadores que no pueden subsistir con salarios de hambre
mientras que se aprovechan del río revuelto los especuladores, se hunden en mi estanque los
banqueros que han trapicheado con hipotecas subprime, con timos de preferentes
y los políticos que tenían que velar por que eso nunca sucediera, se hunden
muchos patriotas envueltos en banderas que han aprovechado su posición para
enriquecerse a cuenta del Pueblo esquilmado y mientras tantos desalmados se
hunden para siempre, se mantienen en superficie sin impulso, venciendo el
principio de Arquímedes, cientos de defensores del medio ambiente asesinados por las mafias que esquilman la Tierra, héroes y mártires como Berta Cáceres, asesinada por defender la vida, José Couso asesinado por hacernos llegar la verdad en Irak, Las trece rosas fusiladas por defender el estado constitucional en una época difícil de mantenerse firmes y consecuentes y en que la postura de los bandos dependía del lugar que la suerte les hiciera ocupar, enfrentando a hermanos contra hermanos, también permanecerían a flote muchas víctimas inocentes de ambos bandos asesinadas por el efecto gregario que se produce en las manadas dogmatizadas, y fanatizadas, flotarían millones de seres humanos que han dado su vida por la justicia y la paz como Martín Luther King, Mahatma Gandhi a pesar de no haber calibrado la repercusión de su movimiento de liberación pacífica, que terminó con un fratricida enfrentamiento entre indús y pakistanis por los que no supieron seguir sus consignas de no agresión y con su propia vida... permanecerían en superficie libres de lastre, los desahuciados
con sus abuelos y sus hijos castigados por la inoperancia y los intereses particulares de dirigentes en las
administraciones, se mantendrían a flote los obreros sin sueldo ni vivienda, los que se enfrentan sin
violencia a los poderes facticos, para luchar por el Planeta y por la Justicia, las mujeres asesinadas vilmente, mientras la
justicia lentamente analiza y busca la mejor manera de protegerlas y castigar a sus verdugos, los
ancianos que pasan frío en húmedas viviendas mientras se enriquecen gerentes y
consejeros de las eléctricas privatizadas, los niños que se encuentran en el
umbral de la pobreza, mientras se gastan ingentes cantidades en armamento, los
ancianos con pensiones miserables que ven como desde el Gobierno sacan pecho y proclaman a los cuatro vientos sus generosas limosnas que les permiten participar de un exiguo 0,9%
mientras premian con un 33% a expresidentes para que puedan hacer boca los días de alterne.
Resumiendo, me gustaría que fuésemos más consecuentes, más
autocríticos, más libres en nuestros análisis y nuestras condenas y no nos dejásemos
emponzoñar e influenciar por los embaucadores que nos mantienen con el velo en los ojos y
aprovechan los medios de información para adoctrinarnos, amansarnos,
encarrilarnos, inducirnos y esclavizar nuestro pensamiento.
¡Limpia tu conciencia y sumérgete en tu estanque para ver
qué es lo que te está lastrando al abismo y libérate para mantenerte a salvo de la vorágine de consumismo chabacano, sin esperar demasiado de
las administraciones y de la justicia de los hombres!
Todos tenemos mucho lastre que soltar para mantenernos a flote, pero debemos intentarlo para volver a recuperar la libertad.
Los seres humanos nacemos libres, pero igualmente que recibimos información y cultura, recibimos adoctrinamiento con mayor o menor intensidad según que el régimen en que vivimos sea democrático, dictatorial, fanático... y así como el perro guía el rebaño de ovejas que la libra del lobo pero las priva de libertad para ser esquilmadas, ordeñadas o sacrificadas en provecho del pastor, también nosotros inconscientemente somos encarrilados por un único raíl y formamos una procesión con más o menos filas en las que se encuentran personas más o menos sumisas pero encarriladas y cada día con menos criterio propio.
Para poder sumergir en nuestro estanque de agua limpia, analizar conductas y condenar tiranos, tenemos que ser capaces de despojarles de sus vestiduras, de sus banderas, de sus estandartes, ideologías, de su prestigio, tantas veces inmerecido, como se puede comprobar en muchos hijos predilectos, monarcas, doctores honoris causa, golpistas y tantas y tantas celebridades que terminaron en las cárceles de todo el Mundo en algunas ocasiones y que en otras muchas, vivieron sin pagar sus crímenes en sus lujosas moradas hasta que la dama más justa que no vive en este mundo se los llevó para el suyo y los sepultó en un abismo más profundo que el que podrían encontrar en nuestro estanque sin fondo "sepulcros blanqueados a los que conoceréis por sus obras y no por sus seguidores adictos, prestigio y poder. Despojadles de todo lo que les rodea y desnudos sumergirles en vuestro estanque, teniendo solamente en cuenta sus actos, sus delitos y la repercusión que han tenido sobre las vidas de los demás y comprobar sin flotadores la verdadera densidad de sus acciones, con esto formareis un fuerte criterio propio y agilizareis vuestra mente para tener un pensamiento libre y justo que os ayudará a soltar el lastre de la mala influencia y de la información contaminada, en los pocos momentos que el ser humano puede ejercer con libertad el cambio de su destino, como podría ser el derecho de voto en unas elecciones libres. Para lograr ser justo en nuestros juicios, debemos primero ser capaces de soltar el lastre que arrastramos; todos en mayor o menor medida estamos adoctrinados, nuestra cultura occidental, nuestras creencias dogmáticas, el entorno familiar, la tribu a lo largo de una vida han moldeado nuestra conducta, y nuestro ser para bien y para mal y somos en parte lo que vemos, oímos y amamos, pero esta amalgama cultural influye en nuestros juicios y así sentimos mas lejano el dolor por un africano abandonado a su suerte en el Mediterráneo o apaleado en una mina de coltán en Goma que por un europeo masacrado en un atentado terrorista en la Ramblas de Barcelona. debemos de ser capaces de juzgar sin que la proximidad, el color de la piel, la doctrina, la ideología ni la pasión nos influyan; por poner un ejemplo tenemos que ser capaces de admitir que el equipo contrario a jugado mejor que nuestro favorito y que nuestro equipo a pesar de haber tenido poco acierto y facilitado su propia derrota, lleva muchas jornadas siendo digno de ocupar un puesto destacado y no merece mi desprecio ni mi cólera por un encuentro desafortunado. Tenemos que hacer juicios durante varios días, semanas, meses y no dejarnos llevar por una decisión colérica de un momento en que nos ha fallado nuestra inteligencia emocional, ser capaces de juzgar fríamente sin pasiones sumergiendo al culpable revestido únicamente de sus culpas, apartado de nuestras simpatías y nuestro desprecio para fortalecer nuestro criterio y hacer un juicio justo y ser capaces así de ver el Mundo sin los cristales que nos ponen en esas gafas que nos restan la visión.
La justicia de los hombres puede juzgar y condenar a la pena capital a un ser humano por ser homosexual, a una mujer por ser infiel a un marido pervertido, a un niño por robar lo que necesita para subsistir, la justicia de los hombres puede convertir a los niños en soldados, a los hombres en esclavos, a las mujeres en sumisas marionetas de los deseos de un padre, de un marido, de un jeque, o en seres encarcelados a perpetuidad bajo un burka que limita su espacio visual y les priva de la perspectiva que ensancha el corazón y los pulmones al no poder observar la belleza de la naturaleza en toda su amplitud, la justicia de los hombres puede exigir la mutilación genital de niñas que desde ese momento sufrirán en su carne el pecado de haber nacido mujer, la justicia de los hombres en épocas no muy lejanas condenaba en campos de concentración y en hornos crematorios a seres humanos por ser de otra raza y la justicia permite en la actualidad a esas mismas víctimas, arrojar de sus tierras, de sus viviendas y separar con muros a otros seres de otra raza y aplicar un genocidio similar al que ellos han tenido que soportar con toda la crueldad del opresor ... en países más occidentales, la justicia de los hombres puede castigar a quien salva vidas en el Mediterráneo y ordenar que se dispare sobre inmigrantes en el agua para alejarlos de nuestras fronteras, puede permitir levantar barreras de concertinas que infringen enormes heridas a personas que huyen de la Guerra y del Hambre muchas veces originada y alimentada desde países democráticos para explotar sus recursos naturales. ¡No! no hay una justicia verdadera, limpia, pura, siempre depende de un régimen, de un juez, de un gobernante, de un tirano, de una cultura. Nuestra justicia de agua limpia, incorrupta, tiene que ser distinta, igual para todos, libre de ataduras, de credos, de prejuicios, para poder juzgar solo los hechos en función del daño ocasionado. Nuestra justicia no tendrá como fin el castigar, sino el formarnos y hacernos seres verdaderamente humanos y verdaderamente libres con una visión real de la realidad distorsionada que nos ofrecen los medios de información manipulados desde el Poder.
Por último mi consejo final
"No permanezcas en la fila de las momias, tu puedes ser el dueño de tu mente, aún estando esta ocupando un cuerpo prisionero de un sistema muchas veces injusto y controlado por poderes facticos.
