viernes, 23 de diciembre de 2022

Respetemos nuestro musgo y a los que no nos respetan

A los que pueden cambiar las cosas, parece que le gustan más las cosas a lo grande; en estos días navideños se pone el acento en respetar los montes y avisan de las sanciones que se impondrán a los que extraigan musgo por el daño que hacen. Comparto esta decisión, debemos de cuidar el medio ambiente ¡pero…! Reflexiono, pienso, y vuelven a mi mente las imágenes desastrosas de nuestras tierras calcinadas, abrasadas todos los años en épocas de calor. Rebobino y contemplo el Monte, donde los caballos solo pueden comer los tojos con permisos difíciles de conseguir, donde por coger piñas se te puede multar, veo esos montes descuidados, sembrados de latas, botellas, plástico, ropas, ramas de talas, rastrojos, silbas…, veo los pueblos y aldeas, donde antes vivían personas que cuidaban esos montes abandonados, porque no interesa la economía de subsistencia y a los que los pueblan se les hace imposible la vida con una legislación que los asfixia, una legislación que les complica la vida para tener dos vacas, para hacer aguardiente, para vivir , veo aldeas de donde arrojan a los ocupas que tratan de darles la vida que les han arrebatado aquellos que no se han preocupan de dotarlos de infraestructuras, comunicación, farmacias, colegios, médicos, escuelas, sucursales bancarias, cajeros, Internet, y me hace pensar si esos señores que se preocupan del musgo no son unos cínicos en grado superlativo. Pienso también en que ese abandono intermedio puede ser la clave del progreso a que ansían algunos gobernantes ¡si! Puede ser la salida para que se instalen en la zona grandes macrogranjas sin que nadie se queje del deterioro de la zona por vertido de purines, puede ser la mejor manera para una minería sin escrúpulos que siembre la zona de residuos tóxicos para hacer más productiva las extracciones, y no hay que apartarse mucho de los núcleos habitados; recordemos el incendio de miles de neumáticos sembrados en Seseña, neumáticos por los que los consumidores habían pagado un canon para su reciclado. Acordémonos también de Doñana, ese paraje de ensueño donde las aves de Europa nos recrean con su presencia, acordémonos de la rotura de la presa sentenciada a romperse; el llamado Desastre de Aznalcóllar. Así se enriquecen unos y así se destruye todo Y como el cerebro asocia, voy pasando de unas ideas a otras y pienso en los chicos que no pueden estar con una caña mojando un anzuelo en un rio o en el Mar sin una licencia, bajo pena de multa, y contemplo esos ríos contaminados, con salidas de vertidos visibles, convertidos en basureros, donde siguen el curso hacia el Mar, trapos y botellas de plástico que se van amontonando en sus orillas en un viaje hacia ese Mar contaminado, donde los petroleros dejan una sombra negra de muerte, donde se depositan millones de toneladas de vertidos y toda clase de productos contaminantes y residuos plásticos que forman inmensas islas. Pienso en nuestras playas donde es un delito coger un poco de arena, cosa que también comparto, pero a la vez pienso en los millones de toneladas de arena arrancados del Sahara para nuestras hermosas playas canarias, donde hacen el gran negocio los hoteles, muchos de capital extranjero, dando trabajo a empleados nativos que se ven obligados a compartir habitaciones, porque de otra manera no les alcanza su sueldo para vivir Y seguimos asociando ideas y pienso en Bárcenas , condenado a 31 años y en la calle a los seis, mientras permanecen en la cárcel personas que han compuesto e interpretado canciones con letras consideradas ofensivas hacia personalidades, pienso en los que están en la cárcel por robar una bicicleta y en lo barato que sale robar millones de euros Sigo dándole vueltas a la cabeza y pienso en los conductores arriesgados que se juegan la vida conduciendo sin cinturón de seguridad y en la necesidad de intimidarlos con multas y pérdida de puntos para de alguna manera proteger su integridad, y acto seguido pienso en los miles de personas que se ponen a correr en zapatillas delante de unos toros, y con una pañoleta roja como única prenda de protección, sin que se vean intimidados de ninguna manera, más bien ovacionados por su actuación irresponsable Pienso en la legislación que protege a nuestros compañeros de viaje en este mundo desquiciado; perros, gatos y toda clase de animales ¡bueno! No toda clase, los toros se pueden torturar públicamente y aplaudir a los torturadores, los caballos se pueden agotar bajo un sol ardiente en algunas romerías, o sistemáticamente en ciudades donde es típico pasear a turistas en carretas floreadas, los perros de caza, no son perros ¡son perros de caza! Y los cazadores no pueden someterse a unas leyes que los protejan, porque se verían obligados a cuidarlos y devolverles con gratitud la ayuda prestada en su decadencia. Bueno, como podríamos cuidar a estos viejos amigos del hombre, si en aluna comunidad, no se cuidan ni nuestros ancianos que son abandonados en residencias, condenados a morir aislados sin medicalización ni hospitalización en épocas de pandemia. Podríamos seguir hablando sin interrupción durante un par de horas y les aconsejo que lo hagan, que reflexionen, porque es bueno pensar, apartarse un poco del raíl donde estamos encarrilados, del consumismo, de la esquilmación, del esclavismo a que sometemos a seres semejantes arrancando coltán para nuestros teléfonos de última generación, a las niñas que tejen nuestras prendas en países subdesarrollados, o incluso a inmigrantes que pueden estar recogiendo fresas en nuestra tierra. Bueno, pero estamos en Navidades y lejos de Ucrania, así que ser buenos y cuidar el musgo, si alguno queda en nuestros montes calcinados ¡Feliz Navidad!

domingo, 11 de diciembre de 2022

La estadística, las ruedas de molino y la Isla de las Candongas

Las estadística puede ser la mayor de las mentiras, y la media estadística, un parámetro soluble en ácido sulfúrico, pero insoluble en agua potable de la que necesitan nuestros campos, nuestros ríos, nuestros ancianos abandonados en residencias, nuestras madres que amamantan hijos sin futuro. Nos sirve la media estadística, para conocer la cantidad de litros de lluvia diaria, necesarios para tener los embalses a un nivel adecuado, siempre que los grades señores de las eléctricas y sus consejeros reclutados de poltronas políticas, no consideren necesario vaciarlos para lucrarse personalmente. Sin embargo, la media no nos sirve para conocer el número de personas que pasan hambre, de niños desnutridos, de miserias en un país rico. La media estadística nos dice que el salario medio en España fue en 2021 de 27.570 € al año repartidos en 12 pagas mensuales de 1542 euros. Esto es sonrojante para los que vivimos con los pies en el suelo y conocemos los salarios de hambre de mujeres sin contrato laboral, o el salario mínimo, o las pensiones de penosa subsistencia de much@s español@s y les causará risa sarcástica a muchísimos gerentes de empresas del IBEX35, alguno cobrando miles de millones de euros anuales, incluso mujeres que en este caso no son mujeres de servir, sino de buen vivir. Si para una estadística de alimentación saludable, se recogen los resultados de muestreo en una población de babosas, el resultado será que las amanitas faloides, son deliciosas y saludables. Si además, los medios de información están controlados por babosas, nos dirán que el salario de los obreros españoles nos lleva a la ruina económica, que los políticos y los gerentes tienen que cobrar más, que al dejar su cargo un presidente de gobierno, tiene derecho a cruzar la puerta giratoria para desarrollar sus habilidades, sean estas las que sean, como si son expertos en cazos, que hay que controlar los flujos migratorios de emigrantes y refugiados que huyen de las guerras que nosotros provocamos en los países que saqueamos, no así la especulación de las cadenas de distribución, porque el Mercado es libre, excepto cuando hay que reflotar a bancos que trapichean con preferentes o hipotecas subprime . Si los ciudadanos por su parte no dedican un mínimo de atención a lo que pasa con los fondos públicos, con las mamandurrias, con los sobornos, con las guerras por armas de destrucción masiva, con las promesas incumplidas de políticos que se preocupan de las chuches de los niños en campaña electoral y les importa una mierda su desnutrición cuando están en las poltronas del Poder, si los ciudadanos anestesiados y apirolados, inoculados por el virus del consumismo, o del programa actual de ¡La reina de las Islas Candongas y de su séquito de mamones” pues ya estamos preparados para arrastrar nuestras miserias con valentía, patriotismo y sumisión y seguir tragando con toda la basura de los medios de desinformación y oír los rebuznos de alguna parte del Congreso de los Disputados Escaños

sábado, 19 de noviembre de 2022

La justicia no tiene un chicle

Estamos acostumbrados a las desagradables sorpresas que nos da la justicia; vemos como condenados a cientos de años, salen en libertad con un par de decenas. Me gustaría saber que laboratorio acreditado calibra sus tiempos y cuál es la trazabilidad de sus patrones, o quizás, no se necesitan medidas estandarizadas y los jueces utilicen la braza, el pie, o tengan un año elástico como un chicle. También me gustaría saber cómo sus procesos siguen todavía en soportes de papel, en una época, que en las viviendas de los españoles, hay dos o tres ordenadores en red y estos españoles, almacenan todas sus fotografías, vídeos, documentos, en pendrives, o en la nube. Entendemos también, claro, que si se facilita mucho el acceso a esta descomunal información, no sería fácil que muchos privilegiados se librasen de la cárcel por haber caducado sus delitos como los yogures. No dejan de sorprendernos también los indultos a corruptos políticos y banqueros, ni las inviolabilidades absolutas de monarcas. Hoy consternados comprobamos, cómo se están reduciendo condenadas a violadores, con la “Ley de Solo Si es Si”. Ya nadie se acuerda de cuando intencionadamente y no por resquicios, ni grietas o errores, el Gobierno de Rajoy, eliminó la Justicia Internacional y tampoco nos acordamos de la chusma que se benefició de esta medida sangrante. Naturalmente que nos preocupa y nos asquea lo que está pasando, pero pensamos ¿Cómo es posible que esto esté sucediendo? ¿Será que, aunque la justicia tenga esos años de chicle que estiran y encojen, no tiene sin embargo, ni un chicle para taponar esta vía de agua fétida que está ensuciando el País? Está claro que nosotros los pobres mortales no tenemos la formación necesaria para entender de leyes y porque esto se produce y no se subsana inmediatamente, aunque después estemos preparadísimos y obligados a formar jurados populares y tomar decisiones judiciales. Si, es cierto, no estamos preparados para entender las leyes, pero nosotros pensamos, y nos preguntamos ¿qué pasaría si por un error de señalización, se desviara el tráfico equivocadamente en una autovía, y se produjeran varios accidentes de circulación simultáneos? Pues lo que pasaría sería que, rápidamente se cambiarían las señales, se movilizarían agentes y se corregiría en unas horas la situación. Entonces, nos preguntamos ¿Qué están esperando los grandes jueces pensantes, y porque no hacen algo, para resolver este enorme problema que lo está enlodando todo, si saben qué el vertido de esas heces fecales, era precisamente, lo que esta ley trataba de evitar?

martes, 8 de noviembre de 2022

Por nuestra Sanidad Pública, por nuestros sanitarios, por los enfermos y por nuestra propia dignidad

La enorme profesionalidad, el amor al prójimo, la empatía, la entrega desinteresada, son los elementos que se enlazan fuertemente, y generando el combustible, que hace latir con fuerza los corazones generosos, incansables, y consigue mantener firmes, sin flaquear, en la mesa de operaciones, en el puesto de trabajo de las urgencias, ayudando con las camillas, con los goteros, al pié de la cama de los enfermos…durante horas interminables, durante días sin horario y meses sin descanso y sin flaquear, a nuestros sanitarios, enfermeras, celadores, médicos de familia, cirujanos, traumatólogos, oncólogos…que no dudan en arriesgar sus vidas e incluso correr el riesgo de contagiar a sus seres más queridos, y mantenerlos unidos como una piña, durante el trabajo agotador, sin medios de protección, sin horarios, en situaciones de urgencia por catástrofes, o en épocas de pandemia, como así lo han demostrado, dando un ejemplo inolvidable, nuestros arcángeles de la salud de la Sanidad Pública; una entrega total y generosa, que les han hecho merecedores de nuestro reconocimiento y nuestros aplausos espontáneos desde las ventanas de nuestras viviendas, en las que permanecimos rigurosamente confinados, pero que este confinamiento agobiante no llegó a embotar nuestras neuronas, ni a congelar nuestros sentimientos y gratitud, que se desbordó como un torrente de agua limpia y clara, ante la entrega generosa de estos grandísimos profesionales de bata blanca, que han sido un ejemplo para el Mundo. Esta entrega desinteresada y sobrenatural, solo se produce por amor al prójimo, sentido del deber y gran profesionalidad; amalgama de valores que hacen posible que la fatiga intelectual y el agotamiento físico, no doble las piernas de nuestros sanitarios, que se regeneran y fortalecen con cada paciente que recobra la salud y es dado de alta, pacientes a los que en ocasiones, y según su evolución, se les han despedido con aplausos. El pretender desde las poltronas de las administraciones, conseguir por presión y coacción, que día tras día y como norma, nuestros queridos sanitarios, se enfrenten a esta forma de trabajo agotadora, confundiendo la entrega generosa y empática, con productividad, rendimiento, objetivos y ratios marcados desde despachos de jerarcas que se han asignado grandes sueldos sin demostrar nada o perdiendo aviones de material sanitario , y que por otra parte están reduciendo medios humanos; enfermeras, médicos, celadores; 6000 sanitarios despedidos después de la pandemia; una herida mortal que desangra la sanidad en la Comunidad, contratos escandalosos y salarios de miseria, que obligan a los profesionales formados con nuestros impuestos, a emigran a países de Europa, donde los reciben con los brazos abiertos y con condiciones de salario dignas, cierres de urgencias… todo ello con el único interés de reducir costes y tensionar y debilitar la Sanidad Pública, mientras allegados y familiares de estos políticos, hacen negocios fabulosos con mascarillas y material sanitario, mientras en la Comunidad de Madrid se gastaron cantidades ingentes de recursos económicos en un hospital sin medios, que más bien parece una nave de almacenamiento de camas para apilar enfermos con síntomas leves. Con esta política macabra, tan solo se puede conseguir, altas comisiones y futuras poltronas doradas al traspasar la puerta giratoria, de unos señores de corbata, depresiones y bajas laborables para otras personas de bata blanca, sufrimiento y defunciones para los enfermos que han cotizado o cotizan para ser atendidos con dignidad por profesionales que sean bien tratados por el Sistema, ruina para la Seguridad Social, enriquecimiento de los lobbys de la Sanidad Privada, donde encuentran poltronas doradas los jerarcas que dejan la política. Para agravar más la situación y el abandono de los enfermos que se ven obligados a recurrir a la Sanidad Privada, se quiere imponer la consulta por videoconferencia. Esta política egoísta, cicatera, interesada, de gobernantes neoliberales sin escrúpulos. se ejecuta paralelamente con actuaciones inhumanas, como el confinamiento sin medicalización de ancianos enfermos, en residencias, con ordenes escritas de impedir su hospitalización, que ha provocado miles de fallecimientos de ancianos que han visto terminar sus días de vida, agonizando, aterrados, desconsolados en soledad, sin entender cual ha sido su pecado y la razón de su cruel abandono, sin la compañía de sus seres queridos. Todo esto ha sido motivo de estrés, desosiego, falta de estímulos, fatiga intelectual, decaimiento y depresiones de muchos sanitarios de corazón de oro, pero de carne y hueso, a los que desde la Comunidad se les culpa de esta vergonzosa situación. La presión, las injurias, las injusticias han logrado doblar sus piernas y hacerles enfermar, a pesar de su gran profesionalidad y su amor y entrega hacia sus pacientes, pero también ha llevado a los sanitarios que aún permanecen firmes, a convocar una huelga. Es por todo esto que el Domingo día 13 de Noviembre, todos los Madrileños y personas de bien que se encuentren ese día en Madrid, participen en la Manifestación, por la Sanidad Pública, por los sanitarios maltratados, por los enfermos desasistidos, por nuestros ancianos abandonados y por nuestra propia dignidad

viernes, 5 de agosto de 2022

Volvemos a las andadas

Ya vuelven a crear ansiedades con "informaciones" de escasez y desabastecimientos, y los que se alimentan a diario con todas las mierdas de TV Basura, sin capacidad de análisis ni criterio propio, saldrán de casa con un nudo en la garganta y una taquicardia de ingreso en urgencias y harán cola como momias teledirigidas para pelearse al final, por los escasos artículos que pongan en las estanterías, con el mono de la necesidad imperiosa y patológica de almacenar aceite, pollos, hielo... en sus despensas abarrotadas, como ya lo hicieron en la crisis sanitaria del covid, con las mascarillas, hidroalcohol, aceite, levadura y hasta papel higiénico, pensando que se acabaría el Mundo si no se limpiaban el culo en lugar de pasárselo por el bidet y aplicarle una fina capa de gel. Ellos que no dan un palo al agua y viven enganchados a la caja tonta, competirán con más dedicación y coraje, del que precisa un corredor de fondo para alcanzar la meta y subir al pódium y disfrutarán viendo su botella de aceite de marca “Las Bobas” en un lugar preferente de su casa-almacén ¿Y sabéis quién se frotará las manos pensando en hacer caja a cuenta de los palurdos consumistas desquiciados? ¡Los mismos de siempre! ¡Los vampiros cotidianos que se agarran como lampreas a la yugular de todos los que nos veremos afectados en poco tiempo! Los intermediarios que desangran al agricultor y asfixian a los consumidores, que retendrán los artículos y subirán los precios a niveles estratosféricos por la ley de la oferta y la mangancha. Las personas sensatas, equilibradas, con un coeficiente de inteligencia por encima del de la bandada de gansos, se quedarán relajados en sus casas y se privarán del pollo, del aceite, del hielo para que los intermediarios no tengan escasez y puedan metérselos por donde se empiezan los cestos y por donde amargan los pepinos. Si usted se priva por una temporada de comer pollos inflados con hormonas en granjas que más vale no visitar, si cambia su dieta a verduras, legumbres y reduce las carnes de esas pobres vacas y de esos cerdos infelices, estresados, hacinados, inflados con mil mierdas, masacrados… en centros de exterminio, que es la carne que nos llega a muchos consumidores, si reduce las fritangas y se pasa a cocidos bien sazonados…le puedo asegurar con conocimiento de causa, que disfrutará de una salud envidiable, esto claro está, si no tiene la desgracia de contraer un covid, un sida, un cáncer… que por desgracia con tanta hormona, tanta química, tanto plástico, tanta contaminación, tanto herbicida, tanto insecticida, tanto pesticida, tanta mierdicida con lo que nos fumigan, nos vemos afectados cada año con mayor frecuencia e incidencia. Sin querer ser ejemplo ni prototipo de nada, les puedo decir que durante muchos años no he ingerido pollo, ni carne, ni leche de mamífero alguno, ni gluten, ni embutidos, ni alcohol, ni tabaco, ni nada que me siente mal, como por ejemplo, el té verde, tan buen antioxidante y que a mí me sienta como un tiro. Tomo como proteína animal, algo de pescado, poco de piscifactoría, huevos, un poco de jamón de vez en cuando y procuro tener una dieta vegetal variada, bien sazonada. No tengo ninguna necesidad física ni psíquica y disfruto de una salud10. No se preocupen por lo que falte en las estanterías, preocúpense de tener una alimentación sana y apañarse con lo que nos queda en las estanterías. Si tienen tierras, cultiven sus verduras, sus alubias, sus tomates… Si no la tienen y pueden hacerse con una huerta urbana, no lo piensen ni un momento y no utilicen sulfatos ni abonos químicos, ni mierdas de Monsanto. Hagan composteras, reciclen sus residuos orgánicos como mondas, cascaras…Ayudarán a este planeta esquilmado que está dando los últimos estertores, gozarán de muy buena salud y se sentirán más felices. Dejen a las momias desquiciadas, llegar de primeras a las estanterías; nosotros nos conformamos con llegar, ir contra corriente como el salmón y no hacerle ni puto caso a las mierdicias de la televisión

lunes, 1 de agosto de 2022

Consejeros con piel de oveja

Los que matan el ganado no son los lobos…tal vez alguno; los que matan el ganado son los incendios de los montes que esperan abandonados, sin limpiar, sin cuidados, sin vigilancia. Los que matan el ganado son otros lobos, tienen piel de cordero, camisa blanca, con corbata en el cuello hablan de España. Los que dejan los montes abandonados por ser gastos superfluos viven forrados, con buen sueldo, buen coche, buena poltrona y nos cuentan historias de malas gentes que llegan hasta España sobre pateras. Son flautistas que arrastran hasta el abismo un país que se abrasa por su egoísmo. Ya no hay lobos, ni corzos, ni ciervos quedan, se abrasaron los zorros en las hogueras, donde todo eran brezos solo hay cenizas, brasas, humos y penas, llantos y ruegos. Ya no corren los ríos por las praderas, ni se visten las flores con mariposas, ya no cantan los grillos, ya no asisten los niños a las escuelas, ya la vida se ha ido de las aldeas, languidecen los viejos llenos de pena