miércoles, 11 de agosto de 2021

El Nuevo desorden Mundial

La destrucción avanza como un ejército desbocado, disciplinado, pertrechado con unas armas de fuego, agua, viento, arena y energía, hambre y enfermedades, en enormes proporciones que la razón no alcanza a imaginar, y otras biológicas de nuevos virus y bacterias, para las cuales, el sistema inmunológico de las especies existentes, necesitaría una evolución natural instantánea, para fortalecer nuestras defensas. Mientras esto sucede, sigue girando la gigantesca rueda dentada que mueve el inmenso tren de engranajes de la economía mundial y se frotan las manos y hacen caja las grandes multinacionales, que ahora tienen mejor acceso a las zonas árticas y antárticas, para realizar perforaciones y extraer hidrocarburos, para explotar materias primas, metales, piedras preciosas, metales, o para perseguir hasta los últimos confines de la tierra a cetáceos, focas, osos blancos, zorros de la nieve y a todo lo que se pueda transformar en dinero, también hacen caja las grandes farmacéuticas, sordas ante el clamor de los contagiados en países subdesarrollados, que han tenido enormes ayudas para acelerar el desarrollo de nuevas vacunas contra el minúsculo enemigo que nuestras fuerzas armadas con todo su arsenal militar no pueden detener. Muchos confiamos en la bondad, en la empatía y en el esfuerzo titánico de los gobiernos del Mundo unidos para detener esta inmensa ola que terminará por engullir todo el decorado del gran teatro creado por los poderosos, dejando al descubierto también para los que no quieren ver, el siniestro espectáculo de dolor, hambre, miseria y destrucción que es este planeta esquilmado; un decorado en el que se sostiene y justifica parte del sistema y tras el que se esconde la legión de buitres que forman la vanguardia de explotación y saqueo, laureados con la razón de la fuerza y la ley del poder. Desde Europa nos dicen que somos culpables y que tenemos que cambiar nuestra conducta y ayudar al Planeta. Son los mismos que pararon con puño de acero y guante de terciopelo, la ola de indignación de cientos de miles de responsables jóvenes, capitaneados por una niña responsable que se enfrentó al Sistema; Greta Thunberg. Todos los que no estén ciegos por la avaricia, el egoísmo, el despilfarro e inoculados con el consumismo chabacano, convertidos en momias ambulantes sin criterio propio, cegados por el consumismo chabacano, conocen la verdad disfrazada y saben que nada detendrá a los grandes esquilmadores, que dejan morir de hambre y desnutrición a millones de niños sin mover un dedo para que decelere el ritmo de la rueda que destruye la vida para convertirlo todo en oro. ¡No! nos echarán la culpa, dirán que tenemos que cambiar nuestros hábitos, pero seguirán bombardeando nuestras mentes con propaganda consumista, dejarán que el curso del rio de plásticos y desechos avance sin control, permitirán que sigan las matanzas de cetáceos, la caza de tigres, los incendios en el Amazonas, las macrogranjas, los monocultivos, los campos sembrados de chatarra tecnológica, los basureros de neumáticos para los que nos obligan a pagar un canon por reciclaje virtual, las explotaciones de niños arrancando coltán... Solo conseguiremos que nos culpabilicen, y solo será posible conseguir que se muevan con gran dificultad, con otra Greta Thunberg surfeando una ola gigantesca; un tsunami de indignación, de lucha por detener la rueda de destrucción que salve el Planeta

viernes, 6 de agosto de 2021

El poema de la vergüenza

La Talidomida Metro de Valencia. Aceite de colza. El Madrid Arenas. Yak 42. Alvia de Santiago. Vuelo de Spanair 022. Muertes, abandono, lágrimas, dolor, clamor sin respuesta, llanto, indignación, reloj sin agujas, muerte en propia vida, llena de aflicción

jueves, 5 de agosto de 2021

1 3 Rosas

Era gratis torturar, ¡que terror! era tan fácil segar ¡tanto amor! y tan simple silenciar ¡opresor! detener su palpitar ¡aplastar! pero imposible borrar ¡con matar! su sacrificio sin par ¡malhechor!