Sus sienes no lucen laureles, porque están todos suspensos, a pesar de sus masters sin exámenes, de sus dudosas obras literarias, de sus sermones vacíos, de sus promesas incumplidas y se merecen un suspenso monumental y estrepidante, después de su descanso vacacional sin prisas, sus ofertas y contraofertas, sus exabruptos, sus reuniones con asociaciones y sus escamotéos con los homólogos, sus sermones en el desierto. Nos volverán a sangrar con unos gastos innecesarios para volver a estar en la misma situación, pero más pobres, más desilusionados, más cansados e indignados por su pachorra a la hora de sacarnos de esta crisis y prepararse para la que se acerca galopante con el Brexit, la guerra comercial ente UUEE y China, la tensión en Oriente, los resultados judiciales contra la Banca que nos repercutirá sus perdidas y sus gastos, los grupos de extrema derecha, los separatismos abonados, la corrupción y la justicia igual para tontos. Quieren una mayoría absoluta y ya la tienen, son todos ¡todos! absolutamente incompetentes, inoperantes, incongruentes, inconsecuentes, irresponsables y lo que es peor, han demostrado que no les importa ni el sufrimiento de los ciudadanos, ni la decisión de las elecciones, solo sus sillones, sus vacaciones, su paraíso dorado
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