La fractura

Con preocupación y tristeza muchos españoles contemplamos como se agudiza el proceso separatista que puede acabar desmembrando el País y cuyas impredecibles consecuencias nos arrastrarán con toda seguridad a un precipicio aún más profundo del que los irresponsables sin alma ni hempatía nos han despeñado. Gota a gota, paso, a paso, sin prisas pero sin pausa, por unos y por otros, nacionalistas y separatistas,  nos han ido inoculando el odio, la incomprensión, la intolerancia, el egoísmo; unos queriendo españolizar sin importarles que cada región de este País tan rico en culturas, lenguas, tradiciones; cada región, a pesar de la fratricida guerra que quiso imponer  un yugo de un solo color, una sola lengua, una sola raza, una sola religión, conserva una idiosincrasia imposible de arrancar, con fanatismos, guerras, persecuciones o dogmatismos baratos, una idiosincrasia que ya forma parte de la propia  herencia genética.

Contemplamos aterrados, avergonzados, entristecidos,  como se enardecen unos y otros desplegando banderas, lanzando al viento discursos vacios, pues no van acompañados de ejemplos y hechos y se atropellan haciendo leyes de última hora, sacando el pecho del patriotismo, unos y otros que con su  pasotismo, su inoperancia, su avaricia desmesurada y su desprecio hacia los ciudadanos que representan han llevado este País que parecía prosperar,  a la ruina económica y social haciéndonos alcanzar una estratosférica deuda externa ilegal e impagable que nosotros no hemos contraído, llevando a los trabajadores a una precariedad insoportable, abandonando a dependientes, dejando sin techo a familias con niños que son desahuciadas sin rubor por los que presumen de patriotismo, recortando derechos sociales sagrados y multiplicando millonarios y pobres en un país fracturado ya mucho antes del órdago separatista.

Estos patriotas de medallita conseguida sin levantar sus posaderas de la poltrona, sin corazón, patriotas de banderita con la que tapan sus vergüenzas, de empresas ofshore en paraísos fiscales, de acogida presurosa a amnistías fiscales que les premia sus tropelías haciéndoles participar al Fisco con un risorio dos por ciento de lo escamoteado conseguido muchas veces con comisiones por adjudicaciones millonarias o con saqueo de fondos públicos, estos hijos predilectos de  palabrería barata y falta de ejemplo, que no han dudado en permitir timos a la Banca como las preferentes con las que han robado el ahorro de su vida a tantos inocentes pisoteados, las hipotecas con suelo y tantas tropelías

Estos patriotas que han puesto en consejos de administración y en la dirección de las cajas de ahorros a esquilmadores que las han hundido, repartiéndose  condonaciones, con sueldos astronómicos, primas, viajes, préstamos a interés cero.

Estos patriotas que alardean de nacionalistas y han permitido la invasión del País a los jinetes de la Troika que han arrasado todo a su paso no dejando como Atila, ni crecer la yerba y todo ello, tras castrar de la noche a la mañana, tras una vergonzosa confabulación de los  partidos  mayoritarios en corruptos, el artículo 135 de la Sagrada Constitución y convertir la deuda privada en deuda pública arrojándonos a los cascos de las bestias especuladoras

Estos patriotas que no les tiembla el pulso  ni pierden el sueño al contemplar cómo se desahucian a familias con menores y ancianos  que han caído víctimas de la codicia de banqueros sin escrúpulos, al firmar hipotecas con mucha letra pequeña y sin la presencia de un notario, personas que han perdido sus puestos de trabajo por la inoperancia de los que predicaban con la liberalización del suelo creando una enorme burbuja del ladrillo, farsantes que se  pavoneaban de que en España se construían más viviendas que en Francia y Alemania juntas y que han permitido que se hayan destrozando nuestras hermosas costas dejando en lugar de sus arenales,  monstruosos bloques de torres de viviendas, hoteles ilegales donde pudiera veranear gratis algún ministro con pocos escrúpulos y que cuando el gran timo de la vivienda se vino abajo no dudaron tras crear un banco malo donde endosarnos  los restos del naufragio, donde algunos carroñeros todavía han sacando las vísceras e hicieron su agosto con ayuda de fondos buitres trapicheando con paquetes de viviendas

Estos patriotas que vendieron  viviendas sociales a precio de ganga a fondos buitres que se mostrasen  generosos en el reparto de maletines aun cuando fuesen  verdugos con los inquilinos

Estos patriotas que sí, se preocuparon muy mucho de reflotar con dinero público a la Gran Banca con lo que nos han robado 40000 millones de euros, Banca que fenecía víctima de la avaricia que propició la desconfianza de los inversores así como autopistas que nunca se habrían construido si en lugar de las comisiones prevaleciese la cordura y el amor por la Patria.

Estos nefastos gobernantes que utilizaron la apisonadora del Real Decreto para imponer unas leyes laborales que han convertido a los empleados y obreros en esclavos explotados por tiranos sin escrúpulos y han dejado la bolsa de pensiones sin un céntimo y con deudas

La unidad de la Nación no se consigue con la Ley que es tan blanda con los corruptos que saquearon el País y se pasean en sus yates,  en sus cochazos, en ocasiones oficiales y en el peor de los casos ocupan la suits de lujo en una cárcel modelo, dedicándose a una tarea especial acorde con su alta alcurnia y abolengo y que consiguen el tercer grado por buen comportamiento o por enfermedad transitoriamente  incurable y salen con la frente muy alta, con el sello de haber pagado sus culpas sin haber restituido las inmensas cantidades de dinero amasado con comisiones por obras faraónicas innecesarias con presupuestos inflados y que no tendrán utilidad pública, al contrario, su mantenimiento desangrará más a los ciudadanos tan pisoteados

La unidad del País se consigue con JUSTICIA con mayúsculas, donde todos seamos iguales, con empatía con respeto. Los ciudadanos nos mantendremos unidos contra el deseo de líderes separatistas que no pueden presumir tampoco de honradez ni de patriotismo, si nos sentimos protegidos, respetados, amparados, defendidos…pero difícilmente se mantendrá la unidad con obreros explotados, estudiantes que después de terminar su carrera universitaria se tienen que marchar sin maleta para trabajar de camareros en otro país y son tachados por los políticos que nos ha tocado sufrir como aventureros, no se mantiene la unidad con minusválidos que esperan las ayudas hasta desesperar mientras políticos con poca ética cobran 1800 euros de desplazamiento con varias viviendas en la Capital, con niños desnutridos, con colas en La Oficina de Empleo y en los comedores sociales…

Yo siento profundamente la fractura que está fraguándose, pero hace mucho que veo como el País se está descomponiendo con la separación de ricos y pobres, de empleados y patronos, de ahorradores y banqueros, de políticos con privilegios y ciudadanos pisoteados, de corruptos paseándose en sus yates mientras se encarcela a titiriteros.