Rita Barbera no es más que el retrato del PP, donde como en
la novela de Oscar Wilde (El Retrato de Dorian Gray) se muestran todas las
fealdades, corruptelas, mamandurrias y trapicheos del partido. De nada sirve tratar de
deshacerse de Rita si todo lo demás permanece. Difícil lo tiene ahora
Ciudadanos para seguir representando su papel de engaña bobos sin que sus
conejillos de indias sigan sin percatarse del fraude. Difícil ocultar una
cloaca cuando sus heces fecales han desbordado y se extienden obligándonos a
tapar las narices para librarnos de su hedor nauseabundo
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